El Joker cayó en un tonel de productos químicos que le blanquearon la piel, le tiñeron el pelo de verde y le pusieron los labios rojos, como un payaso enloquecido.
Sus crímenes siempre implican bromas y chistes que acaban con remates retorcidos que solo le resultan graciosos al Joker.
Puede parecer que está haciendo el payaso, pero este tipo es una mala noticia para Batman y Ciudad Gótica. En un giro sorprendente de los acontecimientos, Batman ha descubierto que, de hecho, hay tres versiones del Joker operando en Ciudad Gótica.
Este, conocido como ´´El Comediante´´ es mucho más astuto que sus homólogos y alberga la esperanza de convertirse en el único y verdadero tormento de Batman.
